
En las cálidas noches valxeritenses, junto a las frescas gargantas durante el estío: No nos hemos sumergido en los profundos y oscuros recovecos del alma humana. Plácidas, cálidas: noches valxeritenses. Bitácora.
jueves, 30 de octubre de 2008
Zanjando las reflexiones sobre la guerra civil española

martes, 28 de octubre de 2008
Sobre historia y revisionismo. La guerra civil española

Los masones, los cátaros y el contubernio

domingo, 26 de octubre de 2008
Carta de Ussía: Venganza. Contestación de Jake
jueves, 23 de octubre de 2008
Cumbre internacional

Es cierto que hay miles de cosas de las que no entiendo ni papa. Por ejemplo: hay una profesora de Derecho Internacional Público en la Universidad de Oviedo que es un hueso. Esa asignatura, como quien dice, no la aprueba ni el tato. Y es que yo no me explico para que tanta importancia en formar en tan complicada erudición a nuestros jóvenes para que luego, en materia internacional los políticos que nos vienen a tocar por desgracia – que habían de ser modelos morales y arquetipos de sabiduría- son una irrisión. Eso nos debería hacer llegar a una conclusión: nos gobiernan los tontos. La aseveración no es infundada, habida cuenta de la década que llevamos. Es cierto: más que democracia, había que llamarla tontocracia. Ésta deriva de plutocracia, que como todos sabemos significa gobierno de los ricos. ¿Cómo hacen los ricos para gobernar? Muy fácil: se hace todo los posible para hacer tontos en masa. La televisión es una manera. Hay más maneras, como la educación en colegios privados, por ejemplo (me refiero a la masa de ellos egresados, no a las excepciones que, si cabe, suelen ser más críticos que ninguno. Leáse Ortega, por ejemplo). Eso explica que se coloque al tonto más tonto gobernando al mundo y al tonto más tonto del suelo patrio poniendo sus pies en la mesa. Porque, visto a toro pasado la que nos han montado unos y otros está claro que no tenían la cabeza buena. Y lo peor es la actitud de niños de colegio, cuando lo que está en juego no es cualquier cosa. Es el orden económico internacional. Poca cosa, dirán ustedes. “Todo es por tanto pillo que hay en la política pulpitante. Yo que Dios mandaría a los ángeles que reventaran a todos esos que en los papeles andan inventando víctimas , al cuento de jorobarnos a los pobres de tanda. Limosnas hay, buenas almas hay; pero liberales por un lado, el Congrieso dichoso, y por otro las congriegaciones, los mentigos y discursiones y tantas cosas de imprenta, quitan la voluntad a los más cristianos... Lo que digo: quieren que no haiga pobres, y se saldrán con la suya. Pero pa entonces yo quiero saber quién es el guapo que saca las ánimas del Pulgatorio... ya se pudrirán allá las señoras almas sin que la cristiandad se acuerde de ellas, porque... a mí que no me digan: el rezo de los ricos, con la barriga bien llena y la carne bien abrigada, no vale... por Dios vivo que no vale” (Misericordia). Si señora: así se habla. A esta la ponía yo a dirigir los designios de la economía mundial. Y de buen seguro que mejor lo haría que los cafres que nos han tocado en desgracia. No se piensen ustedes que el granjero de Wisconsin tiene un argumento mas clarividente que el de esta señora. No, no. Si no, a cuento de qué podría haber llegado a gobernar Bush en norteamerica. Y resulta, ahora, que la política internacional es un cúmulo de niñerías. Como si la cosa no fuera seria. Hace poco, antes de que saliera a la palestra, les hablé yo ya de Bretton Woods, en un artículo pasado sobre economía. Ahora se ha vuelto a poder de moda. Las cosas que se están jugando son muy serias y, por eso, España y Zapatero está haciendo todo lo posible en estar en la cumbre financiera próxima. Rajoy, en esta materia, apoya al presidente del gobierno, aunque bien se sirve de hacer oposición, hablando sobre política internacional y determinado desaires, porque los EEUU quieren claramente dejar a España fuera. Eso no pasaría si los gobernantes no fueran tontos de capirotes, como son. Animales tribales. Porque como señala nuestro antropólogo "español" (lo lo lo lo lo lo lo ló) más reconocido, el Sr. Jauregui, eso es lo que somos los humanos: animales tribales. Por eso los EUA tienen más totems que los trobiandeses,. Y eso que amo a América. Espero que hayan leído los periódicos y se hayan percatado de los que hace poco les hablé sobre economía. Los europeos queremos que haya un nuevo Bretton Woods. No se lo crean: aquello será una jaula de grillos. No merecerá la pena ir. Yo creo que si mandásemos allí a la señá Benina, a la Bularda y a la Caporala, las que a la puerta de San Sebastian se apostaba a mediados de otros siglos se entenderían mejor que los majaderos que van a ir.
martes, 21 de octubre de 2008
Una fosa entre los piornos

Es un hecho significativo el siguiente: los cerebros lavados abundan. Las cabezas mondas y lirondas llenas de mentiras, de falsedades, de interesados mensajes, de oprobiosos valores y de sentencias morales deplorables son legión. Unida a tal reflexión, a redoble, se añade lo que sigue: Impera la amnesia colectiva. Amnesia interesada, abominable. Castración colectiva. Se ha tratado por todos los medios de inocular a generaciones enteras el adocenamiento vergonzoso, persistente, atroz, tras el conflicto bélico civil español. Un silencio como los asolados y fríos páramos castellanos. Son nuestros males castizos, que perduran. Es hora que reflexionemos, desde un plano ético, estético, moral sobre la singular batalla contra los molinos de viento de un singular idealista: el Juez Garzón. Todo lo estético que pueda ser una fosa común. Todo lo estético que pueda ser una reflexión de Jung. O de Kubrick. Hace tiempo que escribí un artículo para un periódico sobre este caballero de la justicia. Hoy me reitero. Muchos españoles hemos sidos herederos directos de épocas ominosas. Unos lo fueron de la Restauración. Otros lo hemos sido del franquismo. Franquismo que colea, como lagartija, a la sombra de la enciclopedia Álvarez. Generaciones de españoles a los que se les engañó, se les mintió, se les ocultaron verdades sabiendo lo tiernos que son los niños. No es dudoso afirmar que por aquellos tiempos por el aire revoloteaba la adultera inmoralidad: civil y política. Aquellos males son aún hoy día más que visibles. Ojeemos los periódicos. Oigámosles: Se encuentran en La Razón, en el ABC, en el PP. “Si aguardamos un poco – nos espetaba Ortega – llegará la historia con su divina capacidad de trasfigurar las cosas poniéndolas en su debida perspectiva”. Pero llevamos demasiado tiempo esperando. Dos generaciones de cerebros lavados son muchos cerebros. Muchas gentes. Muchos borregos, algunos inocentes de su borreguez. Otros no. Una España oscura: una España de boinas, de trochas, de tenderos, de orden, de curas, de mulos. De falsas águilas en verdad despeñadas. De odiar al campo, equivocando el odio. Lo que se odiaba era la miseria. Silencio. Tiempo de silencio. A los españoles se les ocultó una guerra. No es extraño, por tanto, que algunos no quieran abrir heridas, en la política interesada por velar con mentiras y con tierra lo que aquella sinrazón fue. Los tecnócratas del Opus, tras los planes de estabilización de 1959, ofrecieron una coartada de desarrollismo para añadir humo a una guerra, para ellos periclitada, por ganada. Una guerra de hermanos contra hermanos, les contaron los salva-patrias: los de la Victoria. Sin embargo, en este país, y no hace tanto, se mató por política – la ciencia de la convivencia-. Y la cosa no es baladí. En un pueblo alto, cerca del cielo, el más alto de Extremadura aconteció un hecho para mí significativo. No tanto si las lagrimas de una madre no hubieran estado a punto de rodar. Todo aquello, hasta ahora, se había contado como una anécdota familiar, sin aparente trascendencia. La interesada ignorancia velaba los hechos para no interpretarlos como debían. Los recuerdos eran más agradables: son de escuela nacional-católica, de maestros en mesa camilla con brasero, a regla y palmeta y canción de cara al sol a la entrada de clase. La anécdota se trasforma en historieta. Pero no lo fue. Fue algo más serio. Corre el año 1936, en época de carnavales, y un señor labriego, con varios hijos pequeños – y en especial una niña, la más pequeña y pizpireta flor -, se disfraza de Azaña. Yo soy Azaña, reza en un cartel que se pega al cuerpo. El Frente popular había ganado las elecciones. Hoy yo lo sé: no estudié, por suerte, la enciclopedia Álvarez. Quien me refirió esta historia, si que estudió con aquel libro que no nació para ser libro y, por tanto, lo ignoraba. Poco tiempo después aquel labriego y a su hijo mayor le obligan a cavar una tumba. La suya propia. Aquella niña pequeña es testigo de la escena. El delito del labriego era el de ser de izquierdas. Por suerte no se cumplió la pena capital , pese a tener ya sus pies dentro de una tumba. La que bien pudo haber sido una fosa perdida en perdidos pueblos de España. Una tumba al lado de unas matas aceradas y oscuras, al frente de unos piornos, junto a un barranco de un día límpido. Es posible que los llantos de aquella niña flor, que vio las carabinas apuntando a su padre y a su hermano, apaciguasen a sus vecinos que hacían ademán de verdugos. No lo sé. La niña flor fue pragmática: con los años se volvió de parte de los que apuntaban. Su hija, casi también. Sino fuera porque, quizá, se dio cuenta que su abuelo pudo haber sido un desaparecido de los que ahora buscan, en una zanja perdida en un pueblo perdido de España. Una lágrima rodó. Era su abuelo, el que ella conoció; cuando ni ella, ni él, pudieron no haber existido más allá de 1936. Por fin reconoció una cosa: por fin entendió la cruzada idealista de Garzón. Y la gente de la que hablo son gente cercana, de aquí; gente sencilla e inocente.
lunes, 20 de octubre de 2008
La conciencia progresista y la trampa de la liquidez.

jueves, 16 de octubre de 2008
Algunas notas sobre un asunto de actualidad universal: la globalización
Son estas tierras valxeritenses un buen lugar para filosofar. La amenidad de sus arroyos, la claridad de sus fuentes, la suave brisa que recorre sus laderas, así como la insolación, ni mucha ni poca, tanto en la solana y en la umbría, invitan a pensar con tranquilidad. Digámoslo de una vez: sirve para alejarse del mundanal ruido de las ciudades, con sus cláxones, sirenas de ambulancias, coches celulares, hospitales abarrotados, parques llenos, cafeterías repletas. El arrullo de las fuentes, si estas son frescas, bien sirven para reflexionar sobre el mundo y sobre la vida; sobre lo que hay, o sobre todo lo contrario. Es verdad que es preciso, sin embargo, tomar este lugar con una visión cosmopolita. En una actitud de viajeros planetarios y, por que no, en una actitud burguesa. Toda la actitud burguesa que puede tener un campesino. El aire de la ciudad nos hace libres, se decía antiguamente; hoy el aire que se respira en ellas está contaminado. También se dice, muy acertadamente, que la filosofía es una enfermedad que se contrae viajando. Pero, por lo pronto, yo me encuentro aquí, junto a una fuente de agua fresca – y no metafórica -. Viajeros, exiliados, vagabundos, expedicionarios… forasteros por antonomasia, extranjero desconocido: “… de tu andar de aquí para allá, y de que filosofando recorriste tantas tierras por ver cosas”. Desde antiguo se consideró la sabiduría como “cosmopolita”. Ciudadano del mundo. Que es, como quien dice, ciudadano de ninguna parte. En la fuente me hallo. Dándole vueltas a esto de la globalización, con un interés claro: desentrañar lo que en el mundo ocurre. ¿Existe en verdad una definición de Globalización? ¿Convivimos en una aldea global? ¿Son
domingo, 12 de octubre de 2008
De la economía al reloj de esfera negra de Sartre.

Tal y como les dije el otro día, iba a continuar hablando sobre economía. Solo que, con un pequeño matiz: las cosas dan vueltas y de un hilo sale otro, y de otro: otro. Para comprender lo que ocurre en el mundo, si es que somos capaces de ello, hay que hilar muy fino. Incluso así es fácil pincharse y eso, de por sí, no es malo: es un síntoma de que, al menos, estamos hilando algo. Hay muchos otros que se encuentran en la inopia, que es como decir que ni hilan ni cardan la lana. Viven, que no es poco. Y hacen bien, porque no preguntarse por el sentido de las cosas y descansar en vidas sencillas es muy virtuoso. No lo es en cambio cuando el que vive en la inopia se convierte en borrego. A los borregos: palos. Hace poco el premio Nobel de Literatura, José Saramago, daba un rapapolvo a las izquierdas, las cuales han quedado dormidas los últimos años. En eso tiene bastante razón, pues atrás quedaron los gloriosos años que dieron con el Mayo de 1968, la revolución de los claveles, la lucha contra Franco en la clandestinidad de las UCM, las películas de Jean Luc Godard, los libros de primo levi, y las críticas sociales de los hermanos Taviani (como su película Padre, padrone)… Hablo de la burguesía izquierdista e intelectual que el mayo francés impregnó al mundo. La crisis del petróleo, como digo, cambió un modelo paradigmático en los patrones de cambio internacionales y dio lugar a tres décadas de signo neoliberal. Tres décadas, la de los 80, 90 y principios del nuevo milenio que ha apaciguado a la juventud contestataria burguesa y de izquierdas y que en la década de los 60 y los 70 bullían en las Universidades Europeas. El rapapolvo a las izquierdas debe ser sonoro: tres décadas de neoliberalismo, de Thacher, Bush, Wall Street, y la hoguera de las vanidades (Tom Wolfe). En lo intelectual triunfaron los Friedmman y los Hayek, en norteamérica los neocons, que con su fundación FAES Aznar quiere expandir cerca de los lugares donde nació la Institución Libre de Enseñanza. Y se hicieron fuertes intelectualmente en España, através de las facultades de economía y empresariales. Una nueva cultura del éxito. Una cultura que se enfrenta al hedonismo del que, y se que pocos me conocían así, soy partidario: soy un eudamonista desde bien pequeño. Desde que aquí, en España, a principio de los ochenta, teníamos un programa infantil-juvenil digno de aplauso: La bola de cristal. Uno de sus personajes, la bruja avería, hacia una acertada disección ¡Viva el mal! ¡Viva el Capital! Una oposición intelectual de izquierdas se hace precisa. No porque no adoremos las cosas virtuosas de la técnica moderna, los teléfonos móviles, los PC portátiles, la Internet… y otros ingenios del mundo globalizado, sino porque es preciso que ese capitalismo sirva para mejorar la vida en el mundo. Su máximización necesita de determinados diques que lleven el agua a un mundo mejor para más gente: diques intelectuales puestos a los mercados. Una crítica de las que no podemos pasar por alto es la que nos lleva este mundo globalizado en lo económico. La globalización consiste en que los capitales, los dineros, no tienen fronteras: no se le piden pasaportes. En cambio a las personas, para pasar de país, e instalarse en otro si que se les exige. Eso constituye una moral con doble rasero. Es preciso que volvamos a comprarnos la pipa de Bertrand Russell y ponernos el reloj de esfera de Sastre. La izquierda intelectual debe recuperar el lugar moral que le corresponde y defender todo lo que en ella es esencial: el pacifismo, el socialismo individualista, la mordacidad y la ironía contra las religiones e ideologías políticas absolutistas, la militancia racionalista. Y, por supuesto, las contradicciones, que, filosóficamente, son lo más educativo de todo (Savater).
De la economía al reloj de esfera negra de Sartre.
Tal y como les dije el otro día, iba a continuar hablando sobre economía. Solo que, con un pequeño matiz: las cosas dan vueltas y de un hilo sale otro, y de otro: otro. Para comprender lo que ocurre en el mundo, si es que somos capaces de ello, hay que hilar muy fino. Incluso así es fácil pincharse y eso, de por sí, no es malo: es un síntoma de que, al menos, estamos hilando algo. Hay muchos otros que se encuentran en la inopia, que es como decir que ni hilan ni cardan la lana. Viven, que no es poco. Y hacen bien, porque no preguntarse por el sentido de las cosas y descansar en vidas sencillas es muy virtuoso. No lo es en cambio cuando el que vive en la inopia se convierte en borrego. A los borregos: palos. Hace poco el premio Nobel de Literatura, José Saramago, daba un rapapolvo a las izquierdas, las cuales han quedado dormidas los últimos años. En eso tiene bastante razón, pues atrás quedaron los gloriosos años que dieron con el Mayo de 1968, la revolución de los claveles, la lucha contra Franco en la clandestinidad de las UCM, las películas de Jean Luc Godard, los libros de primo levi, y las críticas sociales de los hermanos Taviani (como su película Padre, padrone)… Hablo de la burguesía izquierdista e intelectual que el mayo francés impregnó al mundo. La crisis del petróleo, como digo, cambió un modelo paradigmático en los patrones de cambio internacionales y dio lugar a tres décadas de signo neoliberal. Tres décadas, la de los 80, 90 y principios del nuevo milenio que ha apaciguado a la juventud contestataria burguesa y de izquierdas y que en la década de los 60 y los 70 bullían en las Universidades Europeas. El rapapolvo a las izquierdas debe ser sonoro: tres décadas de neoliberalismo, de Thacher, Bush, Wall Street, y la hoguera de las vanidades (Tom Wolfe). En lo intelectual triunfaron los Friedmman y los Hayek, en norteamérica los neocons, que con su fundación FAES Aznar quiere expandir cerca de los lugares donde nació la Institución Libre de Enseñanza. Y se hicieron fuertes intelectualmente en España, através de las facultades de economía y empresariales. Una nueva cultura del éxito. Una cultura que se enfrenta al hedonismo del que, y se que pocos me conocían así, soy partidario: soy un eudamonista desde bien pequeño. Desde que aquí, en España, a principio de los ochenta, teníamos un programa infantil-juvenil digno de aplauso: La bola de cristal. Uno de sus personajes, la bruja avería, hacia una acertada disección ¡Viva el mal! ¡Viva el Capital! Una oposición intelectual de izquierdas se hace precisa. No porque no adoremos las cosas virtuosas de la técnica moderna, los teléfonos móviles, los PC portátiles, la Internet… y otros ingenios del mundo globalizado, sino porque es preciso que ese capitalismo sirva para mejorar la vida en el mundo. Su máximización necesita de determinados diques que lleven el agua a un mundo mejor para más gente: diques intelectuales puestos a los mercados. Una crítica de las que no podemos pasar por alto es la que nos lleva este mundo globalizado en lo económico. La globalización consiste en que los capitales, los dineros, no tienen fronteras: no se le piden pasaportes. En cambio a las personas, para pasar de país, e instalarse en otro si que se les exige. Eso constituye una moral con doble rasero. Es preciso que volvamos a comprarnos la pipa de Bertrand Russell y ponernos el reloj de esfera de Sastre. La izquierda intelectual debe recuperar el lugar moral que le corresponde y defender todo lo que en ella es esencial: el pacifismo, el socialismo individualista, la mordacidad y la ironía contra las religiones e ideologías políticas absolutistas, la militancia racionalista. Y, por supuesto, las contradicciones, que, filosóficamente, son lo más educativo de todo (Savater).
viernes, 10 de octubre de 2008
Esperanza Aguirre y los liberados sindicales

miércoles, 8 de octubre de 2008
Sobre laicidad positiva, siguiendo a Bertrand Russell.

martes, 7 de octubre de 2008
Sobre economía I
Parece ser que vamos a vivir una crisis económica morrocotuda. Al menos así lo parece tras leer los periódicos, ver los telediarios y escuchar las tertulias. Los sones de invasora presencia de radio intereconomía, los ratios del Ibex 35 y los mercados en tiempo real, suenan hoy, más bien, a barco a la deriva: a zozobra marinera. Hasta hace poco esos tamboriles sonaban a Wagner y a papá de Simba tras una avalancha animal (la entradilla para dar los índices bursátiles eran los del Rey León, la película de Disney). Hoy esas músicas suenan a barco espoloneado. La actitud de los Estados Europeos, ampliando la garantía de los ahorros bancarios y las intervenciones estatales comprando activos financieros -esto es: interviniendo en el santo mercado- huelen muy mal. Eso me parece a mí, que soy espectador corriente y moliente, como casi todos. Soy yo de natural tranquilo, y, es cierto: nunca he visto un pánico. Lo que aquí atrás parecía un problema nacional para comentaristas, tertulianos y políticos varios, se ha mostrado como un problema global. Estaban algunos tan ensimismados con el ladrillos y la burbuja inmobiliaria que no se les ocurrió a los analistas, entre ellos los de intereconomía – bien felices de llenar la saca-, otear la realidad económica mundial. Yo soy, por si no se han dado cuenta todavía, de aquellos que no se creen lo que le cuentan a bote pronto y busca en diferente fuentes la que más le agrada. Y a los que menos me creo es a los economistas, los especímenes más etnocéntricos que habitan las Ciencias Sociales. Por ello, escucho lo que dicen los antropólogos sobre la economía de los yanomanos. Estoy firmemente convencido que con mejor análisis. Estos nos proponen un argumento muy plausible: La clave inveterada en todas las culturas es la de “la energía”. Y creo que en eso estamos. Un análisis simplista a lo Friedman o a lo Hayek, nos haría confundir el problema y, por tanto, las soluciones. Incluso para esto es preferible remontarse a Hegel y analizar los sistemas de necesidades por el propuesto. Parece más o menos claro que nuestro mundo, globalizado, con invasora presencia de ya una cultura casi única, pese a la brecha digital, e interconectado por las pantallas varias antes o después sufrirá una crisis energética. Quizá, por ello, la mejor decisión medio plazo sea la de invertir de Investigación sobre energías renovables: y ya no valen plazos para ello. Los países adalides de una revolución tecnológica en materia de energía hará los deberes. Aunque ya saben, yo soy un pesimista lúcido: y a largo plazo... todos calvos. Mas que nada porque el mundo eligió unos derroteros en su día, no se si buenos o malos, caracterizado por el egoísmo como fuente de riqueza. Es muy posible, no lo sabemos aún, que nos encontremos en una crisis económica de naturaleza diferente de la que hemos tenido hasta ahora. Crisis ha habido muchas y “los pánicos” estaban a la orden del día antes de 1929. No se si se reconocerá como se debe al gran Keynes, fundador de la teoría económica moderna, y muy posiblemente uno de los tipos más inteligentes y observadores del siglo XX y de los pocos economistas de fiar. Sus aportaciones teóricas sobre la economía sirvieron muy mucho para señalar a los gobernantes herramientas con la que manejar la coyuntura económica: a ello se llamó política económica. Decisiones de política fiscal y política monetaria en manos de los ministros de economía de las naciones para manejar a corto y a largo plazo las variables esenciales: desempleo , inversión o interés . A largo plazo, ya sabemos: todos muertos. Planeta: pelota fría Sin embargo, los escenarios económicos son mudables, circunstanciales, en una realidad tozuda y de difícil compresión. Desde 1929 no se había vuelto a vivir ningún pánico, la teoría de los ciclos económicos permitían analizar la historia económica con cierta soltura y los agoreros tenían mala acogida. Todo funcionó bien, como sabemos, mientras el patrón dollar, impuesto por los USA en Bretton Woods, se acomodó a las circunstancias, en lo que se denominó “la pax keynesiana”. La primera crisis llamativa en muchos años fue la llamada crisis del petróleo, la cual empezó a modificar el mapa de poder dentro del mundo... CONTINUARÁ
lunes, 6 de octubre de 2008
El blog de Ana Pastor
Las tertulias entre amigotes de un mismo partido son la mar de divertidas: la tanda de despropósitos, estupideces, sandeces y gilipolleces que se dicen son para partirse el rabo, mear y no echar gota, !tierra trágame! o hacerse, velis nolis, directamente el hara-kiri. El caso es que lo que se dice en esas tertulias no nace por generación espontánea de los dicentes -más quisieran ellos- sino que nacen de los propios políticos haciendo demagogias y populismos, en análisis que no soportan la más mínima enjundia proposicional. Es esta otra de las bisagras del Poder: decir gilipolleces, sandeces y estupideces para que, quien más quien menos, se las meriende. Y si cuela cuela. Yo no se si los del PSOE son tanto, pero los del PP es que llevan la palma. Hablan, por ejemplo, analicemóslo, de que su mejor política social es la de generar empleo y se ponen hechos unos fuegos porque la partida en los presupuestos últimos hayan ido destinados al desempleo 3 billones de las antiguas pesetas. Para lo primero lo espetan así, como una carraca, pero a quien más y quien menos no les explican, (para qué, si no las van a entender), sus políticas monetaristas, ni mucho menos, un simple análisis de lo que la macroeconomía es y como se construye. Un ABC obtuso que se resume en unas sencillas variables difíciles de entender para el ciudadano corriente, !imagínense para los tertulianos afines!, que si les dice un político de su partido que un burro vuela, van y se lo creen. Será que la macroeconomía es un lobo inescrutable: es preferible que no se llegue a pensamiento más arduo. Pero, simplemente, como decía Samuelson, los dados juegan en contra del que no sabe que cosas influyen en la demanda agregada y el la oferta agregada. Vamos , añado yo, que te la dan con queso y te la meten hasta el corvejón si eso se ignora. No es de extrañar, por tanto, que me mueva la hilaridad cuando los escucho apostados entre sí o que me mueva al cabreo, que es lo normal, sabiendo, como se, que son los propios políticos quienes expelen en sus blogs tales desafueros. Si tres billones de las antiguas pesetas les parece mucho para sufragar el desempleo será que les parece mal, aunque no se si son conscientes de que el sistema financiero español, precisamente, no está hecho unos zorros gracias a las prestaciones de desempleo. Parece ser que ellos, los del PP, tienen la varita mágica en la creación del empleo, pero como uno pasó de 4º y tiene aprobada la econometría, se sabe muy bien en que consisten esas varitas y esos palos. A estas gentes del PP les dan pena los pequeños empresarios, pobrecitos, en dificultades, todo por esa política económica de nefanda de Zapatero. Jopé, por modus ponens, los parados no deben ser de su grey, si tienen en mucho las partidas en presupuestos. Ahora se ponen hechos unos basiliscos porque no se deflacta el IRPF y que lo de las 400 Euros queda en agua de borrajas, en parte eso les molesta porque los que mas pierden con esa medida son los que ganan más de 30.000 euros al año. Y, ojo, que somos de los que preferiríamos las dos cosas: los 400 Euros y la deflactación. Aquí atrás trataron de populista a Zapatero, al que no defiendo, e, incluso, le trataron de Pangloss – el Leibniz del Cándido, según Voltaire - porque veía el mejor de los mundos posibles. Cosa curiosa que digan eso de alguien de izquierdas. Pues lean esto que dice Ana Pastor solo como pequeño aperitivo: “Lo más grave es que hoy, se destruye empleo (unos dos millones y medio de parados), no se crean puestos de trabajo y lógicamente, todo esto repercute en la calidad de vida de los españoles. Gobernar con responsabilidad es hacer frente a la crisis económica que padecemos, y que seguiremos padeciendo si no ponemos medidas sobre la mesa que nos ayuden a encauzar la pésima situación por la que atraviesan miles de familias y empresas. Que se lo digan a los que ven cómo la hipoteca no deja de subir, a los que ven como se destruyen puestos de trabajo todos los días...”. Como si ellos tuvieran la varita mágica para resolver las crisis. Bueno, algunas medidas si tienen: de mandar a los Inspectores fiscales y de trabajo de paseo. Paseo para arriba paseo para abajo: expedientes cero. Otra de sus medidas sería la siguiente: “ No podemos demorar más una reforma laboral. Es decir, potenciar la contratación indefinida, simplificando el actual abanico de contratos, bonificando las cotizaciones de los nuevos contratos”. Parece interesante, pero se nota que no es iuslaboralista y que, a lo más, parece una nota más para la galería populista. Los contratos atípicos desaparecería muy fácilmente: reduciendo las indemnizaciones por despido hasta al minimun. Ésto es reconvertir en de trabajo en un contrato civil. Medida que propone, precisamente, la CEOE. La otra receta económica que propone parece bien: “Sería muy interesante hacer una reforma fiscal, incrementando la deducción por vivienda habitual del 15% al 25%, y aumentando también de la base de la deducción a 10.000 euros. Se podría reducir el Tipo impositivo del impuesto sobre Sociedades para PYMES al 20%” Me imagino que, a la vez, habría que reducir las partidas para el desempleo, pues estas medidas, por sí solas, estimularían la creación de empleo en un país, como éste, que es isla robinsoniana. Lugar donde no afectan las globalizaciones donde, precisamente, nos llevan las tesis neoliberales, que ahora no critico. Dígaselo a los bancos españoles, que lo único que esperan es que la crisis no dure más que el agotamiento de las prestaciones de desempleo. Menudo filón he encontrado, con el Blog de la Pastor, ya que ella no deja poner comentarios allí, se los voy a poner aquí. Y es que, precisamente, me he puesto a comentar las cosas que tenían algo más de sesera, que si comento en global, las cosas que van dirigidas a los tertulianos afines, no tendré por donde acabar. http://www.pp.es/anapastor/tema.asp?f=27/08/2008
Once upon a time in América

Amo a América. Pienso es estas palabras mientras el Born in the U.S.A. , de Bruce Springsteen, suena en el radio-CD del automóvil. La siguiente canción será Hurricane, la canción que Dob Dylan dedicó al púgil Huracán Carter. Bajo las ventanillas del coche, pues el aire en la cara me ofrece la sensación de libertad. Mientras, el automóvil serpentea por la carretera, atestada de cerezos a ambos lados, en las laderas del Jerte. Estos días soleados de otoño invitan a vivir. Si señor, amo a América. El Pen-drive tiene una larga lista de canciones. Sonará la bella y virginal Emmylou Harris, que con su larga melena negra, ultra lisa, acompañará a The Band, la banda que tocó Último Vals para Scorsese y después vendrán más, muchos más. Uno de ellos es ese joven mexicano, hijo de mariachis, que cruzó la frontera camino de San Francisco, mientras los standard de Blues suenan en los bares de carretera. Carlos Santana y Jhonny Winter cantando “they are went to
viernes, 3 de octubre de 2008
Diez posiciones ético políticas

Va siendo hora que pongamos en solfa todos y cada uno de nuestros valores de una manera clara y sistemática. Valores que nos definen. Unos valores de participación democrática ante la cual los viejos políticos no están preparados: Una nueva forma de actuar. 1) Defendemos una postura de centro-izquierda, puesto que no somos hijos ni nietos de hacendados ni caciques, sino de obreros y campesinos, que, por haber podido comprar una casa o algunas tierras, no nos vamos a creer que pertenecemos a donde no pertenecemos. 2) Nuestra postura política es el “liberalismo social” o el “socialismo liberal”; abogamos por un sistema democrático como el menos malo de los posibles para nuestras sociedades estatales; nuestra misión es hacer frente a “las plutocracias” que nos gobiernan desde todos los frentes: en especial este de Internet, como nueva herramienta para dar cauce a nuestras opiniones. Nuestra opción es una opción de intelectuales y reflexivos que ponemos en tela de juicio el mundo en que vivimos. Apostamos por una limitación a los mercados en su actuación a través de gastos públicos en educación, sanidad, infraestructuras, Investigación, Ciencia y Desarrollo, Seguridad Social y protección frente al desempleo 3) Abogamos por la absoluta laicidad en el estado, con respeto a todas las confesiones religiosas. Haremos frente a todos los “grupos de presión” que traten de imponer una moral teocrática a todo Cristo. 4) Creemos que en la esencia de las democracias se encuentra en la más osada opción ética: la “libertad de pensamiento” y en los “ciudadanos libre-pensantes”. 5) Aunque mostramos respeto por la figura histórica de Juan Carlos I y su familia, pensamos que las monarquías son un residuo del Antiguo Régimen de los siglo XVI y XVII; por ello, nuestro en nuestro horizonte vemos una “democracia parlamentaria” sin la rémora del Título II de la constitución, con un “sistema democrático republicano”. 6) Defendemos una educación pública de calidad y, por ello, solicitamos que dejen de concertarse colegios de naturaleza privada. Exigimos que la asignatura de religión se imparta donde se debe impartir: en las Iglesias y parroquias. Y toda la educación sea lo que debe ser: una “educación para la ciudadanía” y una “educación para la libertad” 7) Abogamos por el “relativismo cultural”, que significa, siguiendo a Boas, que no existe ninguna cultura ni mejor ni peor a otra, por ello defendemos la pluralidad cultural, políticas de inmigración basada en derechos y solidaridad entre los pueblos. 8)Abogamos por la creación de comisiones éticas en los hospitales, formada por tres profesionales asesores: Un médico, un psicólogo y un Licenciado en filosofía. 9) Habida cuenta de la hipocresía que existe en materia como en el aborto, nosotros sostenemos lo siguiente. Permitir el aborto de manera gratuita a las mujeres menores de 25 años en los hospitales públicos, previo asesoramiento de las comisiones éticas en los hospitales, recayendo la decisión en la joven, siempre que el embarazo no supere los tres meses. Abogamos por una educación sexual sin medias tintas en las escuelas y en
En resumen:
1) Defendemos una postura de centro-izquierda.
2) Nuestra postura política es el “liberalismo social” o el “socialismo liberal”; postura frente a “las plutocracias”. Uso de Internet como nueva herramienta para dar cauce a nuestras opiniones. Nuestra opción es una opción. Limitación a los mercados en su actuación a través de gastos públicos en educación, sanidad, infraestructuras, Investigación, Ciencia y Desarrollo, Seguridad Social y protección frente al desempleo
3) laicidad.
4) “libertad de pensamiento” y “ciudadanos libre-pensantes”.
5) “sistema democrático republicano”.
6) educación pública de calidad: “educación para la ciudadanía” y una “educación para la libertad” 7) la pluralidad cultural, políticas de inmigración basada en derechos y solidaridad entre los pueblos.
8) comisiones éticas en los hospitales: Un médico, un psicólogo y un Licenciado en filosofía.
9) Aborto de manera gratuita a las mujeres menores de 25 años en los hospitales públicos, previo asesoramiento de las comisiones éticas en los hospitales, recayendo la decisión en la joven, siempre que el embarazo no supere los tres meses. Relaciones sexuales responsables.
10) Abogamos por el “bien morir” en los hospitales y casas.
jueves, 2 de octubre de 2008
Una miscelánea variada

miércoles, 1 de octubre de 2008
Recetas para la crisis: cocretas.

A mi cocinar las cocretas se me da de pena. En cambio, preparo unas patatas con arroz estilo a mi abuela, de esas con pimentón, que me salen de rechupete. Es que la verdad: soy así de cocinillas. Es cierto que mi forma de cocinar es de sota, caballo y rey; pero les voy a desvelar un secreto: cocino todos los días para mi mujer, y no se me caen los anillos por ello; en especial me inventé un “provolone” con queso fundido y tomate que es mi especialidad. Poco me importa quien cocine las cocretas, en todo caso, y si estas están buenas me importa un comino que las cocine
http://www.abc.es/20081001/opinion-firmas/emancipacion-puri-20081001.html