martes, 28 de octubre de 2014

Enrique Dussel: Filosofía de la Liberación II

Dv dijo

En relación a la Teoría de la Liberación diría que tiene mucho que ver con que los países latinoamericanos sean católicos y que allí la modernidad se haya dado en sus formas más tardías de forma que la Política ya no esté relacionada con los ideales de los primeros liberales (que es lo que originó el protestantismo) sino con las reivindicaciones del movimiento obrero. Por esto pienso que esta Teoría de la Liberación es una especie de "protestantismo" no burgués sino proletario. Yo por esto simpatizo con esta teoría tanto cuanto con el protestantismo original.


No estoy de acuerdo sobre ello; si estoy de acuerdo con la idea de límite que desde allí se tiene es diferente al filosofar aquí. La Filosofía de la Liberación mantiene que todo pensamiento es un pensamiento situado; para ello usa la categoría de exterioridad y totalidad: la Filosofía de la Liberación está pensando desde la exterioridad como una forma de afirmación y, por tanto, de negación de la negación. Pues la Totalidad les niega y les considera como no-ser. Dussel parte de ahí. Para ello recorrió el humanismo helénico y el humanismo judaico, como las dos tradiciones en las que nace occidente. Y luego, como teólogo, analiza el papel de la Iglesia en América latina. El tercer paso es estudiar a Marx como filosofo que explica la miseria y como un ético, pues. El cuarto paso consiste en las categorías de Levinás de Totalidad y exterioridad. La Filosofía de la Liberación reeelabora todas las categorías históricas desde el colonizado, no desde el colonizador. Para ellos, latinoamérica entra de lleno en la modernidad en 1492, pues “el descubrimiento” no es otra cosa que la mundialización mercantil y económica. La expresión “la modernidad se haya dado en sus formas más tardías” es una característica del pensamiento situado en la centralidad del colonizador. Ellos sufrieron la modernidad en sus carnes, en sus cuerpos, pues la primera intención del colonizador fue extraer oro de Potosí. Cuando la monarquía española, y su idea religiosa, deja de tener peso, es la modernidad capitalista la que vuelven a sufrir en sus cuerpos, con un nuevo pacto neocolonial entre oligarquías extractivas y oligarquías capitalistas de mercado internacional. Por tanto, no es que entren más tarde en la modernidad, sino que se sienten fundamento o motor de la misma, pero como periferia, en una trasferencia “de valor” desde latinoamérica a Inglaterra. Por eso leen a Marx. Pero mejor dejo un enlace, de un libro de 1976 que devoré en pocos días. Lo último que está haciendo Dussel es una "crítica a la economía política" vista con el marco categorial del que estoy refiriendo. Por eso, vuelvo a repetir que las categorías de "liberalismo" y "socialismo" tienen un dinamismo que aquí no somos capaces de alcanzar. Pero no se debe confundir "Filosofía de la Liberación" con "Teología de la Liberación" aunque beben de la misma realidad latinoamericana. Que le Papa sea latinoamericano no es baladí: en latinoamerica se está haciendo buena filosofía. Y están haciendo algo que aquí no se está haciendo, aparte de releer a Marx: están pensando lo que hay y porqué hay lo que hay. Esto es: están haciendo ontología. Mientras que aquí se está haciendo hermenéutica. Que es una cosa que critiqué en el otro foro nada más entrar y me trataron con desdén: como si no supiese de lo que hablaba.

biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/otros/20...024607/filosofia.pdf

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